Comienza su labor educativa el 1 de abril de 1974 según Resolución del SPEPM 1010/74 y fue aprobada el 27 de Agosto de 1974como un colegio católico, bajo la tutela de los sacerdotes jesuitas con su ideario basado en el servicio a los demás y en la búsqueda de la excelencia personal espiritual. En la actualidad, el representante legal es el Dr. Jorge B. Falero y la rectora y vicerectora son las profesoras Fabiana E. Vorburger y Evelyn Ayala, respectivamente. Cuenta con trece divisiones y siete secciones de Centro de Formación profesionales de capacitación laboral. En ellos se imparten enseñanzas de Refrigeración, Electricista,Gasista Domiciliario, Confeccionista a Medida: Modisto/a, Peluquería y Estética, Operador de PC, Asistente Contable.

Un colegio de la compañía de Jesús,inspirado en la espiritualidad legada por San Ignacio de Loyola quiere ser un centro de formación de personas que se incorporen con fervor a la mision humanizadora y evangelizadora de la Iglesia como cristianos comprometidos en nuestra sociedad. Así un coligio o escuela Jesuíta se concibe como un lugar de diálogo, de reflexión compartida, de estimulación mutua desde la cual se observa y estudia la realidad. Se busca el desarrollo de destrezas y habilidades, actitudes y valores, que permitan apropiarse de los contenidos fundamentales de la ciencias y de las artes con una perspectiva dinámica y renovada facilitando su adaptación a un mundo en permanente cambio. Busca la Formación de personas libres y solidariad, concientes de sus potencialidades y de la realidad que lo rodea, abiertos a la trascendencia protagonistas de sus propios desarrollos y agentes.

En nuestro sistema educativo los alumnos son estimulados para que sepan que los talentos personales son dones que deben desarrollarse para el bien de la comunidad humana. Nuestra Institución aspira a que durante la permanencia del alumno este se desarrolle del modo más completo y posible sus capacidades personales y sociales que harán de él una persona capaz de dar lo mejor de si,para ponerlo al servicio de los demás y santificar así el nombre del señor. Esto es el Magis que está llamado a buscar durante toda su vida.