El Proyecto de «La Silla Roja Global» se Extendió más Allá de la Red Global de Colegios Jesuitas

Por María Dolores Briceño
Abr 18th, 2018

El Instituto Abdón Calderón (IPAC), colegio con orientación Cristiana que brinda formación integral a niños y jóvenes, está teniendo una activa participación en el Proyecto de La Silla Roja Global. A continuación comparto los testimonios de esta magnifica experiencia:

Testimonio Paula Yela Almeida

Hablar sobre la experiencia de la Silla Roja de Fe y Alegría es algo que llena demasiado mi corazón, fue una aventura única que nos enseñó a valorar más la educación que recibimos día a día, el saber que con solo hacer lo que nos gusta y emplear nuestros valores y creatividad en las actividades que realizamos íbamos a poder hacer un gran cambio en la vida de los niños de Fe y Alegría es lo que más me motivaba, a realizar mi mayor esfuerzo, para que todo salga bien.

Nuestro país es nuestra casa y por ello, nosotros los jóvenes, tenemos la enorme responsabilidad de apoyar y buscar la forma de ayudar a nuestros hermanos que se merecen lo mismo que nosotros, y que mejor, que darles una ayuda con la educación, lo que hará que nuestro país esté lleno de profesionales, y que crezca cada día más. Más que un cambio y aporte en la vida de ellos, fue un cambio y alerta a nosotros y a nuestro corazón, esos pequeños nos enseñaron que no se necesita de dinero o de cosas materiales para ser feliz, nos enseñaron que la vida nos dará muchas batallas, pero nunca imposibles de vencer con la ayuda de Dios y el esfuerzo de cada uno.

La Campaña La Silla Roja es un trabajo único y muy especial, brindar educación a sectores donde es muy complicado acceder a la educación pública o privada es un trabajo que exige mucho sacrificio y empeño, pero esta campaña está en buenas manos y sé que la educación y el futuro de estos niños está en buenas manos.

Cada una de las actividades que realizamos en el colegio fue organizada con mucho amor y esfuerzo, los fondos que recaudamos y los materiales que entregamos fueron de parte de todos los Calderonianos que aportaron con su granito de arena para brindar un pequeño apoyo. Fe y Alegría hace una gran labor permitiendo que instituciones educativas privadas formen parte de esta campaña ya que construye un camino para que las personas con comodidades económicas puedan conocer la realidad que viven nuestros hermanos ecuatorianos.

No queda más que agradecer a los organizadores que nos permitieron ser parte de esta hermosa campaña y experiencia, gracias a ellos hoy tenemos una forma diferente de ver la vida y además de eso nos motivaron a ayudar a los demás sin esperar nada a cambio.

Saber que contribuimos a que los niños tengan una sonrisa cada día, y una escuela a la que ir a aprender, para ser líderes del mundo en un futuro, fue nuestra mayor satisfacción; y espero en un futuro poder ver a esos niños llenos de anhelos cumpliendo sus sueños.

Testimonio Emily Zavala Freire

“No siempre podemos hacer cosas grandes, pero si podemos hacer cosas pequeñas con gran amor” Madre Teresa de Calcuta

Lo que necesita una persona nunca lo sabremos con exactitud, pero en lo que si nos podemos fijar es en las condiciones en las que se encuentra. No todos tienen todo y siempre alguien necesita de algo, la vida tiene muchos disfraces puestos, y muy pocos se los quitan.

He vivido una experiencia inolvidable definitivamente, he experimentado la mayor humildad posible, y me he dado cuenta de lo mucho que tengo y lo poco que aprecio. Que una persona tenga mucho puede significar que está vacío, sin embargo las personas que carecen de algo son las más llenas.

Algo que me nace día a día es tratar de ser bondadosa, ser caritativa, ser un ejemplo. En las obras y acciones que realizo, muestro los valores que me han inculcado, y con los que puedo llegar a ser mejor.

Ese sentimiento de gratitud y alegría con lo más mínimo, llegó a mí, cada segundo que estuve con ustedes (niños y niñas de Fe y Alegría) fue algo increíble, fue sentir cada sonrisa, escuchar sus palabras y expresiones. Confirmo que lo mejor de todo fue ver cuán agradecidos estuvieron en todo momento, así haya sido algo pequeño, pero que al final significaba mucho por ambos lados.

Fuimos nosotros lo que ayudamos con cosas materiales y tiempo, pero no saben lo agradecidos que estamos porque ustedes nos dieron mucho más, nos enseñaron a valorar, a apreciar, a ser mejor y a crecer en valores. Cada actividad realizada es una huella dejada en sus corazones y en los nuestros también.

Estoy tan agradecida por el compartir y la acogida que nos brindaron en todo momento, y este movimiento de Fe y Alegría es algo que no solo cambia los corazones de las personas beneficiadas sino que da una vuelta al mundo entero. Así lo siento, y los motivo a seguir avanzando para hacer más cambios y dar ese toque de buena voluntad a más personas; es una oportunidad para que mejoren y pongan los pies sobre la tierra y aprendan a estar agradecidos por todo lo que tienen en sus manos.

Que cada objetivo que tengan en sus vidas lo logren con fe, y que cada acto para alcanzar su meta, lo hagan con alegría. Definitivamente ayudar no es algo que se me complique en lo absoluto, siempre que ese instinto me nace lo hago con amor, todas las veces que el mundo me necesite ahí estaré, porque es por ustedes que estoy aquí, detrás de una pantalla escribiendo palabras de aliento y agradecimiento. Como extrañaré ayudar, nadie lo sabe, pero nunca dejaré de hacerlo y aquí estaré lista para servirles.

Si bien es cierto todo esto es humano, pero es Dios quien tiene el poder de hacer que todo esto se realice, es su amor hacia nosotros que sobrepasa las barreras de cualquier mal o tentación y es por él que todo fue posible.

Finalmente, un gracias no basta, para devolver lo mucho que ustedes aportaron en nosotros como personas, porque esa es la bondad que no viene de las manos, si no del corazón de cada uno.

Testimonio Valentina Mantilla Ossa

Haber sido parte de la Campaña La Silla Roja fue una experiencia no solamente reconfortante, sino también muy divertida. Cuando fuimos a visitar el colegio para donar los útiles escolares, la felicidad en la cara de todos los niños fue indescriptible, cuando les organizamos el agasajo por navidad, y jugamos con ellos, y les dimos regalos, se pudo notar aún más la alegría.

Creo que el trabajo de la Campaña La Silla Roja es muy importante, ya que se enfocan en ayudar a los centros educativos para que todos estos niños puedan estudiar, pero lo más importante es que lo hacen con amor y perseverancia, se puede notar la entrega total que le dan a esta campaña, y esto es lo que me gustó de ser parte de la Campaña La Silla Roja.

El trabajo en equipo, la solidaridad, la ayuda a los demás y sobre todo la entrega máxima fueron solo algunos ingredientes para hacer algo que sería favorable para el futuro de los niños. Debemos saber que ayudar siempre llenará nuestros corazones y el de los demás, puedo decir que todos los que puedan apoyen esta campaña, y nunca duden en formar parte de él ya que la experiencia vivida es sumamente gratificante.

Instituto Abdón Calderón (IPAC)