Construyendo Ciudadanía Global en tiempos del Covid-19

Por Yénifer López Ramos
Abr 9th, 2020

Mientras personas del mundo entero se encierran en sus casas estos días para contribuir a frenar esta pandemia, muchas cosas andan ocurriendo. Encuentros virtuales, encuentros improbables; estamos descubriendo habitaciones y ventanas con solo asomarnos a la pantalla del ordenador.

Hace dos años se iniciaba un reto común, el sueño de generar un espacio de encuentro entre el profesorado de Fe y Alegría y Educsi; de la mano de la FIFyA, EDUCSI, Alboan y Entreculturas surgió la primera edición del curso de Innovación Educativa para la Transformación Social.

Realizado ya el curso, y avanzando a ritmos diferentes, con realidades tan diversas, el miércoles 25 de marzo, pudimos encontrarnos y volver a conectar. Esta vez con otros objetivos, de reconocernos ante esta crisis, de escucharnos, de cuidarnos a través del diálogo. Si algo hace rico este espacio es la diversidad y a la vez cuan interconectadas están nuestras vidas.

Compañeras y compañeros de Guatemala, de Ecuador, de Colombia y de España, compartían, explicando las problemáticas de sus centros, diversas, sí, pero bien similares.

Una cuestión quedaba clara, la preocupación por esa brecha digital, que en estos tiempos se sigue abriendo dramáticamente, el alumnado que no tiene acceso a internet, a dispositivos electrónicos, las familias que tienen que hacer trucos de magia para poder ser educadoras de infantil, de química y explicar la Edad Media en inglés, o la escasa formación del profesorado a la hora de poder ofrecer educación de calidad de manera remota, … La brecha existe, y una vez nombrada, los matices cambian según la realidad; aquí surge el reto, pero también el mundo de oportunidades, de conectar de otras formas, de acompañar. Colegios organizándose a través del whatsapp, plataformas digitales como Educate Magis, que ayudan a conectarse internacional y nacionalmente a equipos docentes, tutorías a través de Zoom, teléfono y skype, clases virtuales, vídeos en Facebook…

Acompañar y fortalecer en este tiempo al profesorado, sobrecargado laboral y emocionalmente, era también una de las preocupaciones en la conversación: la falta de formación, la falta de medios para conectarse, la carga en la preparación de recursos y corrección de tareas y, sobre todo, la carga en el seguimiento a aquellos alumnos y alumnas más vulnerables, a los que ya es difícil acompañar en situaciones menos complejas.

Desde Guatemala, también, nos planteaban la realidad de su alumnado que se está enfrentando a realidades muy complejas en sus hogares, siendo el centro educativo el refugio, donde aparte de aprender asignaturas encuentran acogida, cariño y comida; los equipos de profesorado se están organizando para preparar desde del propio centro bolsas de alimentos junto a las guías de tareas. Esta realidad compartida por tantos países y lugares del mundo; nos hacía poner los pies en el barro, poner cara a niños y niñas cuyas vidas se han vuelto un punto más frágiles de lo que ya podían ser. Nos recordaban cómo en estos momentos más que nunca, los centros, el profesorado, Fe y Alegría, tienen el reto y la responsabilidad de no solo centrarse en lo pedagógico, sino de educar en lo emocional y espiritual, acompañando en estos momentos que están siendo tan imprevisibles.

Los retos que surgen en estos momentos son grandes, son complejos, y mirar hacia delante es todo un acto de valentía, pero si algo nos siguen enseñando estas conexiones y encuentros es a mirar hacia los lados, a seguir caminando junto a otras personas, a dejarse acompañar a la vez que se acompaña a otros, reconociéndonos como vulnerables. Es ilusionante encontrarse en la pantalla del ordenador personas de contextos tan diversos, pero que miran hacia un horizonte común, a quienes les duele la realidad, pero que trabajan desde su rincón del mundo compartiendo experiencias, recursos, ideas… para poder transformarla a través de la educación.

Articulo originalmente publicado en https://somos.entreculturas.org/