La Interculturalidad en la Educación Jesuita: ¿cómo podemos llevarla a las aulas?

“Tenemos enormes posibilidades de alentar la esperanza en nuestro mundo, contribuyendo a la formación de hombres y mujeres, justos, verdaderos ciudadanos del mundo, capaces de generar diálogo y reconciliación entre los pueblos y de éstos con la creación.” (El P. General, JESEDU-Rio2017, 64)

Muchos de nosotros hemos leído esta cita antes, ya sea de forma aislada o en el contexto del discurso que el P. General Arturo Sosa pronunció en el Congreso Internacional para Delegados de Educación en Río de Janeiro en el 2017. En los últimos años, hemos escuchado que el término Ciudadanía Global se utiliza cada vez más en el contexto de la Educación Jesuita. En el 2017 la Formación para la Ciudadanía Global se incluyó como una de las 12 acciones a las que se comprometieron los Delegados de Educación en JESEDU-Rio2017, en el 2019 el Taskforce del Secretariado sobre Ciudadanía Global publicó una definición Ignaciana de Ciudadanía Global y ese mismo año el compromiso con la Ciudadanía Global se incluyó como uno de los 10 Identificadores Globales en Una Tradición Viva que hacen que una escuela jesuita sea jesuita. Un aspecto importante de la Ciudadanía Global que está intrínsecamente ligado, y que está siendo reconocido como otro aspecto fundamental de nuestra Educación Jesuita es el de la Interculturalidad. De hecho, este también ha sido nombrado como uno de los 10 identificadores globales de una escuela jesuita hoy en día. Como tantas comunidades en todo el mundo están siendo desgarradas por tensiones raciales, étnicas y religiosas, la necesidad de abordar estas tensiones, de entablar un diálogo intercultural respetuoso y de ver a Dios en nosotros mismos y en el otro se vuelve cada vez más importante.

“La educación se encuentra hoy ante un desafío que es central para el futuro: hacer posible la convivencia entre las distintas expresiones culturales[1] y promover un diálogo que favorezca una sociedad pacífica. Un itinerario de estas características pasa a través de algunas etapas que conducen a descubrir la pluralidad de culturas en el propio contexto de vida, a superar los prejuicios viviendo y trabajando juntos, a educar “a través del otro” en la mundialidad y en la ciudadanía. Promover el encuentro entre distintos ayuda a comprenderse recíprocamente, sin que esto suponga renunciar a la propia identidad. Es grande la responsabilidad de las escuelas, llamadas a desarrollar en sus proyectos educativos la dimensión del diálogo intercultural.” (Educar al Diálogo Intercultural en la Escuela Católica, 2013″)

Esto plantea entonces la pregunta de ¿cómo podemos ayudar a construir y fomentar una convivencia pacífica?

“La dimensión intercultural es, en cierto modo, parte del patrimonio del cristianismo con vocación “universal”. En la historia del cristianismo se lee un proceso de diálogo con el mundo, en búsqueda de una fraternidad entre los hombres cada vez más intensa. El punto de vista intercultural, en la tradición de la Iglesia, no se limita a valorar las diferencias, sino que contribuye a la construcción de la convivencia humana.” (Educar al Diálogo Intercultural en la Escuela Católica, 2013)

Teniendo esto en cuenta, ¿cuál es la mejor manera de ayudar a nuestros alumnos y, de hecho, a toda la comunidad escolar a reconocer y celebrar la diversidad, a superar los prejuicios y a trabajar juntos para construir una visión global y un sentido de ciudadanía global? ¿Existen programas o proyectos en su escuela que trabajen en este sentido? ¿Es algo que incorporas en tus clases? ¿Crees que deberíamos centrarnos más en la comunicación y la educación intercultural? ¿Cuáles son las habilidades para la comunicación intercultural que crees que debemos enseñar a nuestros alumnos?

En noviembre y diciembre del 2020, Educate Magis invitó a algunos profesores a iniciar esta reflexión participando en el piloto de un nuevo programa de formación para profesores sobre comunicación intercultural. A lo largo de las sesiones pasamos de entender nuestra propia identidad, examinando posibles prejuicios, malentendidos o estereotipos y cómo éstos podrían influir en nuestra interacción con los demás, a examinar nuestras identidades como escuelas u organizaciones jesuitas, las similitudes y diferencias en las escuelas de todo el mundo, los retos a los que todos nos enfrentamos y cómo podemos responder a estos retos de manera significativa.

La naturaleza interactiva de las sesiones de formación significó que los participantes tuvieron la oportunidad de practicar las habilidades presentadas con sus homólogos en otras escuelas jesuitas de todo el mundo, a través de conversaciones profundas y significativas. Las habilidades principales que practicamos fueron las de Escucha Activa y Habla Intencional utilizando el modelo de conversaciones espirituales Ignacianas.

Estamos preparando un nuevo módulo de formación para finales del 2021, del que compartiremos más información en los próximos meses. Mientras tanto, nos gustaría invitarte a compartir lo que tú entiendes como interculturalidad, ¿crees que se debería enseñar este tema en nuestras escuelas y por qué?, ¿existen programas en tu escuela o lecciones en tu aula que ya enseñan interculturalidad? y ¿cuáles son las habilidades para la interculturalidad o la comunicación intercultural que crees que debemos aprender nosotros mismos y enseñar a nuestros estudiantes?. Nos encantaría conocer tu opinión al respecto. Comparte tus ideas aquí: La interculturalidad en colegios jesuitas – ¿qué es y qué importancia tiene?