A través de este artículo Fe y Alegría en El Salvador brinda reconocimiento público a sus docentes, que construyen ideas y proyectos para sacar el potencial de sus estudiantes. Gracias a ellos son personas integrales en todas las áreas de la vida. Este artículo fue escrito por Marcella Aguilar y publicado originalmente en la página web de Fe y Alegria.

Cada año se gradúan alrededor de 76,018 jóvenes de escuelas, colegios y Universidades, quienes se encuentran deseosos de formar un futuro prometedor, que les permita desarrollarse en un ámbito profesional para alcanzar su plan de vida dentro de la sociedad.

Este esfuerzo y trabajo de preparación constante es gracias a la dedicación que día con día realizan miles de docentes, maestros y educadores para desarrollar los temas de clases. Estas personas son parte importante en la preparación profesional pero también son esenciales en la vida del estudiante a lo largo de toda su vida.

Ser docente es una ardua tarea, ya que hay que estar contantemente renovando los conocimientos, aprendiendo nuevas herramientas, además de invertir grandes cantidades de tiempo para que los temas desarrollados sean comprensibles. Es una labor que requiere entrega y pasión, es por ello que en el día del docente queremos expresar nuestra admiración a quienes se dedican a formarnos.

Durante los últimos años hemos visto cómo las condiciones y los contextos de educar han ido evolucionado, como el caso más reciente de una Pandemia Mundial como el COVID-19, que forzó a los docentes a innovar y adaptarse al mundo digital sin previo aviso. Esto trajo consigo, un sinfín de nuevos retos y noches de desvelos para acoplar todo un sistema educativo completo a la virtualidad.

Todos estos cambios generaron preocupaciones y ansiedad, además de acumular muchas responsabilidades de casa y de la docencia. Ser docente en estos últimos dos años, ha sido duro y complicado además de cansado. Cada día nuestros docentes llevan a cargo el futuro de quienes estarán liderando el país, sin contar la presión que tienen también de ser padres y madres de familia, con cuentas que pagar e hijos que educar.

Estas personas llamadas docentes se convierten en esos padres y madres postizos que adoptamos en el camino de la vida profesional, porque gran parte del tiempo del estudiante se invierte en las aulas de clases. Es por ello, que como institución que promueve la educación popular es esencial contar con personal humano, que acumule experiencias y la capacidad instalada para formar y guiar a nuestros estudiantes.

Nos interesa formar personas que transformen vidas, y donde el pilar fundamental sea una buena educación con valores, y esto solo se puede lograr con docentes que generen espacios de conocimiento a través de la calidad humana. Debemos de darle el reconocimiento público a estos docentes, educadores y maestros que construyen ideas, proyectos para sacar el potencial de sus estudiantes, gracias a ellos somos personas integrales en todas las áreas de la vida.

Gracias docentes por soñar junto a los estudiantes, gracias docentes por todos los regaños y lecciones aprendidas que en un futuro siempre recordaremos por las enseñanzas dentro y fuera de los salones de clases.

Reiteramos como institución educativa el rol y protagonismo que tienen los docentes, que hoy en día se de el reconocimiento que merece su labor y compromiso, para que valoremos el esfuerzo y dedicación que ponen en cada clase desarrollada, así como también el amor por la docencia que inspira a otros a formar y educar.

¡Estamos orgullosos de contar con docentes, que transforman personas para transformar vidas, Felicidades en su día!